Envejecimiento activo y saludable: la vida después de los 60 años cambió
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Por Cathalina Serin y Matías Tabilo
Se estima que para el año 2100 las personas mayores de 60 años representarán el 36% de la población en Chile, superando a la de niños y jóvenes, el cual equivaldrá al 21%. En la Región de Coquimbo 89.543 habitantes pertenecen a este rango etario y 14.797 participan activamente en una organización social.
Actualmente, el país está cursando un fenómeno de transformación social denominado Envejecimiento Poblacional que implica un cambio en la demografía, debido principalmente a la baja tasa de fecundidad, la reducción de la mortalidad en edades tempranas y la mayor esperanza de vida, la que superaría los 85 años en 2050, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). Si en 1992 los adultos mayores eran el 9,5% del total de habitantes del país, en 2022 representaban al 18,1%. Es por esto, que cada vez hay más actividades e instancias que contemplan a este grupo social, quienes motivados por un estilo de vida más saludable, han adoptado nuevas pasiones y actividades recreativas como realizar deportes, viajar y ser parte de algún club social afín. Este último, es el principal punto de encuentro y vital para su socialización, a través de los cuales contribuyen significativamente a la comunidad.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la vejez es el deterioro físico y psicológico que experimentan los individuos a medida que pasan los años, por lo que sufren diversos cambios, como la disminución de la capacidad física, la aparición de arrugas y canas, así como cambios en la memoria y las funciones cognitivas. Una de las formas de tratar esta problemática y mejorar las condiciones del envejecimiento ha sido mediante el progreso en materia de salud y bienestar en la población, lo que implica un aumento en la esperanza de vida, de acuerdo a los datos entregados por el INE, el año 2020 era de 82.1% años en mujeres y 77,3 años en los hombres, triplicando lo que se estimaba para el siglo XX.
La población adulto mayor, que considera desde los 60 años en adelante, es de 3.449.362, de los cuales 89.543 se encuentran en la Región de Coquimbo, números que para el año 2050 se duplicará según cifras de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Esto implica nuevas formas de vivir la vejez fomentando una vida saludable con la participación social y el desarrollo de actividades culturales, recreativas e intelectuales, que estimulan el bienestar emocional y mental de este grupo etario.
En este sentido, los Clubes de Adultos Mayor (CAM) han sido el principal impulsor del denominado “envejecimiento activo”, ya que ofrecen un espacio de encuentro e interacción, en el que tienen la posibilidad de establecer nuevas amistades y conexiones sociales, lo que ayuda a combatir el aislamiento y la soledad. Las principales características que deben tener los CAM son contar con una personalidad jurídica vigente, un rol único tributario y que sus miembros sean personas de 60 años de edad o más, ya que de lo contrario solo podrán actuar como socios cooperadores. De esta manera, el adulto mayor que quiera formar parte de un CAM únicamente deberá consultar en la municipalidad de su comuna por una organización que esté registrada y que cumpla con sus intereses personales.
Según el estudio La Contribución de las Organizaciones de la Sociedad Civil a la Infancia y las Personas Mayores, realizado por la Pontificia Universidad Católica de Chile en el año 2018, expone que en la Región de Coquimbo existen un total de 465 organizaciones de personas mayores con 14.797 participantes, números que ubican a la región en el séptimo lugar a nivel nacional en esta materia.
Una de estas organizaciones es el Club de Adulto Mayor Días de Gloria de la comuna de Ovalle. Como cada día martes desde hace 20 años, los miembros de la agrupación poco a poco comienzan a reunirse en su sede ubicada en la localidad de Sotaquí. La primera en ingresar es Nora Leóón Astudillo (81), una de las integrantes más antiguas y quien fue la presidenta desde el año 2003 al 2020. Luego, llegaron otros miembros como Mariela, Bartola y María. Al pasar de los minutos ya había ingresado la mayoría, y como de costumbre se saludaron y comentaron lo que fue su semana. En esta ocasión, están celebrando el cumpleaños de Aurora, un hecho que no es ajeno, pues, en la medida de lo posible festejan los cumpleaños de cada uno. Verónica Valenzuela (71) quién es la actual presidenta y representante legal de la agrupación, señala “nuestro club tiene 22 años de vida y somos 47 socios activos. Además, pertenecemos al programa del adulto mayor de la municipalidad de Ovalle y tenemos un convenio con la caja de compensación La Araucana”.
Las principales actividades que realizan en el club consisten en convivencias y encuentros como la hora del té, clases deportivas, bailes, paseos y viajes. En esta línea, Verónica Valenzuela, comenta “jugamos la lota, bailamos, salimos a pasear y celebramos los cumpleaños. También tenemos una profesora que nos da clases de folklore. La pasamos súper bien”.
Por otra parte, existen instituciones que brindan actividades para la tercera edad, como lo son la municipalidad y el Servicio Nacional del Adulto Mayor (SENAMA). Este último, dependiente del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, y que tiene como finalidad “contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas mayores del país”. SENAMA imparte programas, capacitaciones para sus colaboradores, charlas para sus miembros, subsidios y fondos concursables para la realización de eventos de las agrupaciones.
Uno de los factores esenciales que incentivan la participación en el club se debe a la necesidad de combatir la sensación de soledad y sentirse útil. Mariela Valenzuela (62), quien fue socia cooperadora de la agrupación y hoy ya lleva tres años como socia activa, cuenta “vivo sola y constantemente me sentía inútil sin hacer mayores cosas. Desde que dejé de trabajar, ya no tenía una vida activa, algo que me motivara a salir de la cama. Hasta que conocí el club, llevo tres años en él y para mí los días martes son sagrados, espero la hora de poder ir. Es un lugar donde me distraigo y comparto con las demás socias, pues, la paso bien, aprendo, me río, bailo y lo mejor es que me siento acompañada. Me alegra ser parte, porque he podido conocer nuevas personas, otras realidades”.
Por su parte, Bartola (93) la integrante de mayor edad y que tiene dificultades para caminar, espera todos los días martes para asistir, “yo soy sola y el club ha sido algo fundamental para mí, me siento querida, me apoyan y me mantengo activa. Me doy ánimos para salir, ya que me regalonean mucho. Estoy agradecida”. Es por esto que el Club Días de Gloria se ha convertido en una importante red de apoyo para sus integrantes, ya que brindan un espacio para socializar, compartir, crear lazos y tener un sentido de pertenencia. Además, la participación en las diferentes actividades les ha permitido compartir experiencias, preocupaciones e intereses similares, lo que puede ser reconfortante emocionalmente para sus miembros.
También existen otras medidas que benefician y se complementan con el actuar de las organizaciones del adulto mayor como lo es la medida tomada a mediados del 2022 por la municipalidad de Ovalle en colaboración con el Instituto Santo Tomás, con el programa de apoyo y acompañamiento para la tercera edad denominado “No estás solo” para satisfacer sus necesidades básicas más urgentes. Además, el municipio cuenta con un Centro Diurno para los Adultos Mayores que es financiado a través de un convenio con el SENAMA y que tiene la finalidad de brindar servicios en el ámbito personal, social y comunitario para mejorar la funcionalidad de las personas mayores.
En esta línea, Johanka Taucare representante del programa, afirma “tenemos una plaza de 30 adultos mayores. Para poder ingresar se deben cumplir con los siguientes criterios: ser mayores de 60 años, pertenecer a los primero cuatro tramos del Registro Social de Hogares y tener un grado de dependencia leve o moderada previamente acreditado por personal de la salud. De cumplir con los requisitos y tras ser seleccionado, el beneficiario se somete a una evaluación geriátrica integral que está a cargo un equipo de profesionales, entre ellas, una trabajadora social, kinesióloga, psicóloga y una podóloga para posteriormente diseñar el plan de atención adecuado a las necesidades del adulto mayor”.
Mientras que a nivel nacional el SENAMA está trabajando en una Política Integral de Envejecimiento Positivo 2012 – 2025 en conjunto con el Ministerio de Salud (MINSAL), que el año 2021 lanzó el Plan Nacional de Salud Integral enfocado en las personas mayores. Esto con la finalidad de promover la autonomía, el autocuidado y la protección de los derechos de las personas de la tercera edad e incrementar los niveles de bienestar, tanto en el ámbito personal como social.
En ese sentido, también es importante recalcar que la población de adulto mayor está en constante crecimiento, pues, según el estudio realizado en 2017 por el Centro Latinoamericano y Caribeño de Demografía (Celade) estima que para el año 2035, las personas mayores de 60 años superarán la de niños y jóvenes menores de 19 años de la población de Chile. Y para el año 2100 representarán el 36% del total de habitantes del país.
Es en este contexto en el que la población adulta mayor representa cada vez un porcentaje más alto donde instancias como los clubes de adulto se posicionan como espacios inclusivos y enriquecedores en los que sus miembros se sienten reconocidos y se valora la vasta experiencia y sabiduría acumulada por esta generación que está transformando el concepto del envejecimiento hacia una etapa más de la vida en la que se puede disfrutar y vivir plenamente. Por lo que se deberá seguir trabajando para generar un ambiente sano e integral para este grupo de la sociedad, y para dejar en claro que la diversión, el aprendizaje y la conexión humana no están limitadas por la edad.